Por Valeria Vázquez
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) expresó su preocupación tras el reciente hallazgo de restos humanos calcinados y cientos de objetos personales en un rancho del municipio de Teuchitlán, Jalisco. La portavoz del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Elizabeth Throssell, calificó la situación como “profundamente perturbadora”, especialmente porque la finca había sido inspeccionada meses antes por la Guardia Nacional y la Fiscalía de Jalisco sin detectar indicios de delitos.
El sitio, presuntamente operado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), habría sido utilizado para reclutar y entrenar a jóvenes de manera forzada bajo engaños laborales. La ONU instó a las autoridades mexicanas a investigar posibles omisiones en la operación de búsqueda inicial y garantizar justicia para las víctimas de desapariciones vinculadas al crimen organizado en el país.
