Una denuncia en redes sociales se ha vuelto viral tras la publicación de videos de un tiktoker identificado como “Luis Mi Padre Hermoso”, quien reside en Ciudad Altamirano, Guerrero. En sus grabaciones, se le observa saqueando nidos de pericos y promoviendo la caza ilegal de animales protegidos, como tejones, coyotes, armadillos y tlacuaches. Además, el sujeto destruye colmenas de abejas endémicas, poniendo en riesgo la biodiversidad local.
Estas acciones, que afectan a especies protegidas por la ley mexicana, son ilegales y están penadas por la Ley General de Vida Silvestre y el Código Penal Federal. El saqueo de nidos y la caza ilegal pueden conllevar penas de prisión de 1 a 9 años, así como multas que van de 300 a 3,000 días de salario. Las abejas, por ejemplo, son vitales para la polinización de plantas y cultivos, por lo que su desaparición tendría un impacto negativo en los ecosistemas y la agricultura.
A pesar de la viralización de la denuncia y las solicitudes de cientos de ciudadanos, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) aún no ha tomado medidas al respecto. Esto ha generado una creciente indignación en redes sociales, ya que muchos usuarios insisten en que no se debe permitir que este tipo de prácticas queden impunes.
Aunque algunos defienden que estas actividades son comunes en zonas rurales y son una fuente de sustento para algunas familias, la falta de acción por parte de las autoridades podría alentar la caza furtiva y el tráfico ilegal de especies. La Profepa informó que ya presentó una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) y localizó la extracción ilegal de pericos en el municipio de Pungarabato, Guerrero.
El saqueo de nidos y la caza ilegal representan una grave amenaza para la fauna y los ecosistemas de México, por lo que es crucial que las autoridades actúen con rapidez para sancionar a los responsables y evitar más daños al medio ambiente. La sociedad debe continuar denunciando estas prácticas para proteger las especies y garantizar que se cumpla la ley.
