El Papa Francisco continúa este jueves con la fisioterapia motora y su tratamiento con terapia de oxígeno a altos flujos, luego de que se le retiró la ventilación mecánica no invasiva utilizada durante la noche, revelaron fuentes vaticanas.
“Tras despertarse, el Papa continuó con sus terapias, incluida la fisioterapia motora activa. Como estaba previsto, tras la ventilación mecánica no invasiva durante la noche, por la mañana volvió a la oxigenación de alto flujo con el uso de cánulas nasales”, detallaron.
La Santa Sede había informado de que Francisco había pasado una noche “tranquila” y estaba descansado al cumplir su tercera semana ingresado en el hospital Gemelli de Roma por sus problemas respiratorios.

El papa argentino se mantiene “estable”, no ha sufrido nuevas crisis respiratorias como las del pasado viernes y ha empezado la fisioterapia motora, aunque “en consideración a la complejidad de su cuadro crítico, el pronóstico permanece reservado”, destacó el reporte médico.
El pontífice, de 88 años, se encuentra ingresado desde el pasado 14 de febrero a causa de una neumonía bilateral y otros graves problemas respiratorios que mantienen en vilo al mundo.
Su neumonía continúa con su “evolución normal” pero los médicos insisten en que esta estabilidad debe entenderse dentro de “la complejidad” de su caso, subrayaron las fuentes vaticanas.
