El esperado nuevo disco de David Gilmour, titulado Luck and Strange, trae una sorpresa especial en sus créditos: el nombre del fallecido teclista de Pink Floyd, Richard Wright. Aunque Wright, quien fue compañero de banda de Gilmour durante décadas, falleció en 2008, una grabación inédita de este icónico músico aparece en el nuevo álbum de su amigo.
En una entrevista con The Sun (vía Ultimate Classic Rock), Gilmour reveló detalles sobre esta inclusión especial. “Es una extraña sensación usar piezas grabadas hace más de 20 años”, comentó. Recordó que, al final de la gira de On an Island en 2006, se reunió con la banda en un granero, junto a Rick Wright, Guy Pratt y el baterista Steve DiStanislao. A pesar de las gélidas temperaturas del granero, los músicos crearon una pieza que, años después, se convertiría en el tema principal de Luck and Strange.
Gilmour detalló: “Tenía un pequeño riff y estuvimos improvisando durante 15 minutos. Ese es el tema que se convirtió en ‘Luck and Strange’. Todas las estrofas, la introducción y el final están en esa toma original, sin ensayo ni preparación previa”.
El guitarrista describió a Wright como “un tipo único con un estilo singular” y destacó su valor como socio musical. A pesar de las diferencias entre ellos, Gilmour subraya la importancia de Wright en su carrera.
David Gilmour ha estado hablando de Luck and Strange durante meses, comparándolo incluso con el icónico The Dark Side of the Moon de Pink Floyd. El álbum, que se lanzará el 6 de septiembre, fue grabado en Brighton y Londres durante cinco meses. La esposa de Gilmour, la escritora Polly Samson, ha compartido en su Instagram detalles sobre las sesiones de grabación.
El disco cuenta con ocho temas nuevos y una versión del tema de 1999 de The Montgolfier Brothers, “Between Two Points”. Hasta ahora, se han lanzado dos sencillos: “The Piper’s Call” y “Between Two Points”, este último con la colaboración de su hija, Romany Gilmour.
