Por Kari Nava
El pasado 18 de abril se ha dado a conocer una noticia que ha conmocionado a la comunidad deportiva, María Herranz Gómez, una destacada gimnasta española de tan solo 17 años, ha fallecido debido a complicaciones derivadas de una meningitis. La joven atleta, residente de Cabanillas del Campo, Guadalajara, España, dejó este mundo de forma repentina en la madrugada del pasado jueves, tras apenas 24 horas de lucha contra la enfermedad.
María, reconocida por su talento y dedicación en la gimnasia de trampolín, representó a España en el Mundial de Gimnasia de Trampolín celebrado en Birmingham, Reino Unido, el pasado otoño. Su participación en eventos de renombre, como el Campeonato de España de 2023, la había consolidado como una figura prometedora en el deporte.
El Ayuntamiento de Cabanillas del Campo expresó su profundo pesar por la pérdida de María, describiéndola como una “niña encantadora, dulce, simpática y querida por todos”, así como un ejemplo destacado como deportista.
La noticia del fallecimiento de María Herranz Gómez ha desatado muestras de condolencias y solidaridad por parte de diversas instituciones deportivas. Tanto el Comité Olímpico Español como la Real Federación Española de Gimnasia lamentaron su partida, extendiendo sus más sentidas condolencias a sus familiares y amigos.
En honor a su memoria, el alcalde del municipio ha decretado dos días de luto oficial en Cabanillas del Campo, suspendiendo las actividades socioculturales previstas durante ese periodo. Asimismo, se ha ordenado que todas las banderas de los edificios públicos municipales permanezcan izadas a media asta o con un crespón negro durante el periodo de duelo.
La pérdida de María Herranz Gómez deja un vacío irremplazable en la comunidad deportiva, recordándonos la fragilidad de la vida y el impacto perdurable que deja el legado de un joven talento que se va demasiado pronto. La gimnasia española y el mundo del deporte en general siempre la recordarán con cariño y admiración.
