La actriz que da vida a Gamora aseguró que las medidas del estudio para mantener todo en secreto tiene ventajas y desventajas.
Es innegable que Marvel Studios ha encontrado una fórmula que le ha funcionado bastante bien para el crecimiento de sus películas, es cierto que en los últimos dos años se ha visto en problemas por sobresaturar a la audiencia de contenido, pero a pesar de eso sigue liderando la taquilla mundial. Por más de diez años, el Universo Cinematográfico de Marvel ha dado grandes sorpresas, y quizá una de las películas que más impresionó al respecto fue Spider-Man: Sin Camino A Casa (92%).
Kevin Feige implementó hace un tiempo una política interna para poder mantener todo en secreto, sobre todo porque algunas de sus estrellas habían cometido errores en el pasado revelando accidentalmente detalles antes de tiempo, como Mark Ruffalo y Tom Holland. Para combatir eso, el presidente de Marvel Studios decidió que ni siquiera sus estrellas tendrían información sobre sus personajes y su lugar en las películas.
Es claro que esto ha funcionado, pero el estrés es una de las grandes consecuencias, tan sólo hay que recordar a Andrew Garfield quien era constantemente acosado por la prensa para saber si estaría o no en la última película de Spider-Man, o el mismo Alfred Molina quien dijo que sí se metió en problemas. Ahora quien habla al respecto es Zoe Saldana, quien da vida a Gamora en Guardianes de la Galaxia (91%), y ahora regresará, aunque como otra versión del mismo personaje.
Durante su aparición en Hot Ones de First We Feast, en donde las estrellas pruebas alitas y boneless con diferentes niveles de picante, la actriz mencionó que a veces estas medidas hacen que trabajar para Marvel se sienta como estar en un culto, aunque ha aceptado que esto tiene ventajas para la audiencia y desventajas para los actores, ya que se mantiene la sorpresa hasta el final, pero ellos no tienen oportunidad de prepararse lo suficiente al no saber lo que pasa hasta el día del rodaje.
