
Para conmemorar el décimo aniversario de The Witcher 3: Wild Hunt, uno de los juegos más influyentes de la última década, Xbox ha presentado dos controles de edición especial inspirados en el universo del brujo Geralt de Rivia. El anuncio ha sido recibido con entusiasmo por la comunidad gamer, aunque no sin cierta decepción en nuestra región.
Un diseño que rinde tributo a la leyenda del Lobo Blanco
Ambos mandos fueron diseñados como homenaje al universo de The Witcher y buscan capturar visualmente la esencia de su protagonista y su mundo fantástico:
- Mando estándar: Con una estética sobria y elegante, este control luce un acabado negro mate combinado con detalles en gris y plateado. Incluye el icónico emblema de la Escuela del Lobo y símbolos mágicos que remiten al lore del juego.
- Mando Elite Series 2: Dirigido a los jugadores más exigentes, esta versión premium añade empuñaduras personalizadas y un detalle distintivo: el número “3” grabado como si hubiera sido arañado por una criatura salvaje. Un guiño sutil, pero poderoso, a la tercera entrega de la saga.
Una edición limitada… y con restricciones geográficas
Ambos controles están disponibles exclusivamente a través de la tienda oficial de Microsoft. El mando estándar tiene un precio de €79.99, mientras que la versión Elite asciende a €169.99. Sin embargo, hay una traba importante: por ahora no se encuentran disponibles para su compra directa en México ni en el resto de Latinoamérica.
Esta limitación ha generado molestias entre los fans de la región, que históricamente han demostrado un fuerte apego por la franquicia de CD Projekt RED. Xbox no ha confirmado si planea expandir la distribución de estos mandos a más mercados en el futuro.
Una década de historia
The Witcher 3: Wild Hunt se lanzó originalmente en 2015 y desde entonces ha sido aclamado como uno de los mejores RPGs de todos los tiempos. Su narrativa madura, mundo abierto vibrante y personajes memorables lo convirtieron en un hito del gaming moderno. Esta edición especial de controles representa, no solo una pieza de colección, sino también un símbolo de la huella que el brujo dejó en millones de jugadores.