El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tomó una medida drástica al elevar a 125% los aranceles impuestos a China. La decisión, que entra en vigor de inmediato, responde a los gravámenes de 85% que Beijing aplicó en represalia a las tarifas impuestas por Washington.
En un mensaje publicado en su cuenta de Truth Social, Trump argumentó que la medida fue tomada debido a la “falta de respeto” que China ha mostrado hacia los mercados globales. “China se dará cuenta de que sus días de estafar a Estados Unidos y a otros países son insostenibles”, aseguró el mandatario.
Esta acción se produce después de que Estados Unidos implementara una nueva ronda de aranceles a casi 60 países, con una tasa acumulada del 104% sobre China. Sin embargo, Trump anunció una pausa de 90 días para los aranceles de otros países, excluyendo a China de esta suspensión.
