En un hecho inédito, trabajadores del Poder Judicial de la Federación que se oponen a la Reforma que se discute en el Senado de la Republica, dieron portazo en las instalaciones de ese recinto legislativo e ingresaron por la fuerza hasta el salón de plenos.
Pasadas las 16:30 horas, los manifestantes burlaron los filtros externos de los alrededores del recinto de Paseo de la Reforma e Insurgentes, e ingresaron hasta la explanada donde se encuentran los medios de comunicación.
Al grito de “el poder judicial no va a caer, no va a caer” y de “traidores, traidores, traidores”, los inconformes ingresaron por la fuerza al Salón de Plenos. Los guardias de seguridad pretendieron replegarlos con extintores, pero no los pudieron contener.
La marea humana se hizo presente, y desde las gradas su grito retumbaba en el Salón de Plenos, grito secundado por los legisladores de oposición que, con la mano derecha en alto, secundaban las consignas.
Los manifestantes tomaron la máxima tribuna del Senado. Ahí las legisladoras de Morena Citlalli Hernández y Ernestina Godoy, infructuosamente trataban de conciliar con los inconformes y llamarlos a la calma.
Ante esta situación, Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado, declaró un receso indefinido en la sesión en la que se preveía la aprobación de la Reforma Judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Al momento continua el receso.
