La sinestesia es un fenómeno neurológico en el que la estimulación de un sentido provoca respuestas en otro. Por ejemplo, algunas personas pueden “ver” sonidos en colores, “saborear” palabras o “tocar” texturas con la vista. Aunque parece sacado de la ciencia ficción, la sinestesia es real y ha sido estudiada científicamente durante más de un siglo.
¿Qué es la Sinestesia?
El término “sinestesia” proviene del griego syn- (junto) y aísthesis (sensación), lo que se traduce como “percepción unida”. Se estima que entre el 2% y el 4% de la población tiene algún tipo de sinestesia, aunque muchas personas pueden experimentarla sin ser conscientes de ello.
Este fenómeno ocurre cuando hay una conexión inusual entre regiones del cerebro responsables de procesar diferentes sentidos. En lugar de procesar la información de manera aislada, los sentidos se activan simultáneamente, creando experiencias únicas y a menudo intransferibles.
Tipos de Sinestesia
Existen más de 80 tipos de sinestesia documentados. Algunos de los más conocidos son:
• Sinestesia grafema-color: Asociar letras o números con colores específicos. Por ejemplo, alguien podría ver la letra “A” siempre de color rojo y la “B” de azul.
• Sinestesia sonido-color (cromestesia): Percibir colores al escuchar música o sonidos. Algunos músicos, como Franz Liszt o Duke Ellington, reportaban ver notas musicales en distintos tonos de color.
• Sinestesia táctil-emocional: Sentir emociones específicas al tocar ciertos objetos o texturas.
• Sinestesia léxico-gustativa: Asociar sabores con palabras. Por ejemplo, alguien podría sentir un sabor dulce al escuchar la palabra “lunes”.
• Sinestesia de secuencias espaciales: Percibir números, meses o días de la semana en posiciones espaciales específicas. Algunas personas “ven” los meses del año organizados en círculos o líneas tridimensionales.
¿Por Qué Ocurre la Sinestesia?
La sinestesia se cree que es hereditaria, ya que a menudo se encuentra en familias. Algunos estudios sugieren que se debe a una mayor conectividad entre regiones cerebrales que normalmente están separadas.
Una teoría es que durante el desarrollo del cerebro, las conexiones entre diferentes áreas sensoriales no se eliminan completamente, lo que permite que los sentidos interactúen de maneras inusuales.
Investigaciones en neuroimagen han demostrado que cuando una persona con sinestesia escucha música, las áreas del cerebro responsables del procesamiento visual también se activan, lo que no ocurre en la mayoría de las personas.
Sinestesia en el Arte y la Música
Algunas de las mentes más creativas de la historia han reportado tener sinestesia. Entre los artistas y músicos sinestésicos más famosos se encuentran:
• Wassily Kandinsky – El pintor ruso afirmaba que podía “escuchar” colores y “ver” la música. Su arte abstracto se basaba en esta experiencia sensorial.
• Franz Liszt – El compositor y pianista húngaro describía su música en términos de colores y pedía a los músicos “tocar más azul o más amarillo”.
• Duke Ellington – El legendario jazzista veía colores específicos al escuchar distintas notas musicales.
• Pharrell Williams – El productor musical ha dicho que su sinestesia le permite “ver” la música en colores vibrantes mientras compone.
¿Se Puede Desarrollar la Sinestesia?
Algunas personas reportan experimentar sinestesia ocasionalmente bajo la influencia de drogas psicodélicas como el LSD, la psilocibina o la mescalina, lo que sugiere que la sinestesia puede ser inducida temporalmente alterando la química del cerebro.
También hay estudios que indican que la sinestesia puede entrenarse en cierta medida. Algunas personas, tras repetidos ejercicios de asociación, logran experimentar conexiones sensoriales similares a las de los sinestésicos naturales.
Conclusión
La sinestesia es una ventana fascinante hacia la percepción humana y la neurociencia. Aunque sigue siendo un misterio en muchos aspectos, su estudio nos ayuda a entender mejor cómo el cerebro organiza y procesa la información sensorial.
Para quienes la experimentan, la sinestesia no es solo una curiosidad, sino una forma completamente distinta de interactuar con el mundo. ¿Podría ser que todos tengamos algo de sinestesia sin darnos cuenta? Quizás la clave esté en prestar más atención a nuestros sentidos.
