Por Sofia Swindall
El motín en el Centro de Reinserción Social del Estado de Tabasco (Creset) dejó siete presos muertos y múltiples heridos, desatando caos dentro y fuera del penal.
Villahermosa vivió un día marcado por la violencia tras un motín ocurrido en el Creset durante la madrugada del jueves. La Fiscalía estatal confirmó que siete reclusos fallecieron, seis más resultaron heridos y cuatro policías sufrieron lesiones al intentar sofocar la revuelta.
Videos difundidos por los internos en redes sociales mostraron pabellones en llamas, gritos y caos. Un preso identificado como “el cabo general del patio” denunció en uno de los videos: “Nos están matando a toda la gente”. Según sus declaraciones, las autoridades penitenciarias habrían intentado imponer cuotas y ejercer control, lo que habría detonado el enfrentamiento.
Violencia en las calles y tensión en el penal
Mientras el motín se desarrollaba, Villahermosa también fue escenario de incendios provocados: varios vehículos y al menos tres tiendas fueron incendiados. Las imágenes de llamas y humo en las calles generaron alarma entre los habitantes.
La policía utilizó tanques de gas lacrimógeno para entrar al penal y controlar la situación. Afuera, familiares de los reclusos bloquearon una carretera exigiendo información sobre sus seres queridos y que el director del penal diera explicaciones.
Antecedentes de violencia en el Creset
El motín no es un hecho aislado. Hace un mes, un operativo policial incautó armas y drogas en el Creset. Al día siguiente, el entonces director, Juan Manuel Arteaga, renunció tras amenazas del crimen organizado que incluyeron el abandono de un cadáver en la puerta del penal.
Este penal ha estado bajo la sombra del crimen organizado por años. En 2021, un enfrentamiento interno dejó seis muertos y nueve heridos, y las estructuras de poder al interior siguen bajo investigación.
Coordinación criminal en motines y disturbios
El crimen organizado en Tabasco ha utilizado en repetidas ocasiones los motines en cárceles como distracción para generar caos en las calles. Este método, que incluye incendios y bloqueos, es común en fechas cercanas a Navidad, como ocurrió el año pasado con disturbios en cuatro cárceles del estado.
Reacción de las autoridades y el panorama en Villahermosa
Mientras Villahermosa aguarda respuestas sobre los hechos, la ciudad enfrenta una creciente ola de violencia que preocupa a sus habitantes. Además del reciente motín, un ataque armado en una discoteca el pasado 24 de noviembre dejó seis muertos y 10 heridos.
Las autoridades locales y estatales han pedido calma, pero las interrogantes sobre el control del crimen organizado y la seguridad en el estado permanecen abiertas.