Por Fernanda Sánchez
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció que buscará un acuerdo con Donald Trump, quien se perfila como próximo presidente de Estados Unidos, para gestionar las deportaciones masivas de migrantes. La propuesta consiste en que, en caso de que se lleven a cabo deportaciones, los migrantes sean enviados directamente a sus países de origen, en lugar de ser enviados a México.
Durante una conferencia de prensa matutina, la jefa del Ejecutivo federal destacó la solidaridad de su gobierno con los migrantes, pero subrayó que la prioridad de México es recibir a sus connacionales. “Nuestra principal función es recibir a los migrantes mexicanos”, indicó Sheinbaum, reiterando el compromiso de México con la población mexicana, pero buscando también que las autoridades estadounidenses faciliten el regreso de migrantes a sus respectivos países.
Este planteamiento se da en el contexto de las políticas migratorias que podrían cambiar bajo la administración de Trump, quien ha mostrado posturas firmes sobre el control de la migración hacia Estados Unidos.
