Día marcado en rojo en el calendario de Shakira y Gerard Piqué. Este domingo su hijo mayor, Milan cumplió 10 años y para celebrar una fecha tan especial la cantante le organizó una fiesta con todos los amiguitos del niño en su mansión de Esplugues de Llobregat.
En medio de un ambiente familiar y festivo, con varias fans de la colombiana a las puertas de su residencia coreando sus grandes éxitos y cantando “feliz cumpleaños” al pequeño, e incluso con dos youtubers con ganas de protagonismo y de entretener a los curiosos y a los numerosos medios de comunicación reunidos en las inmediaciones disfrazados de policía, poco a poco comenzaron los preparativos.
A primera hora de la tarde llegaba a la casa de Shakira todo lo necesario para hacer del cumpleaños de Milan un día inolvidable: un pastel, animadores y juegos infantiles para amenizar la fiesta y los invitados; en torno a 15 niños entre los que se encontraban el hijo del ex jugador del Barça Patrick Kluivert que fueron entrando poco dispuestos a disfrutar de la fiesta.
El cumpleañero Milan, aparecía poco después en coche acompañado por su hermano Sasha y su padre Gerard Piqué, con el que había pasado el fin de semana. De lo más sonriente y sin dejar de hablar con sus hijos, el ex futbolista accedía a la fiesta no por la casa de Shakira, sino por la de sus padres, que sigue comunicada con la de la cantante a pesar de la presencia hace unos días de una hormigonera para levantar un muro entre ambas propiedades.
Poco después, Piqué abandonaría el lugar para asistir a los partidos de la liga de fútbol de streamers que preside, la Kings League. Se desconoce si antes acompañó a Milan hasta la fiesta y se reencontró con su ex, con la que este fin de semana se ha especulado que intentó reconciliarse un mes después de su separación aunque, tras la negativa de Shakira, optó por continuar con su relación con Clara Chía.
