Por: Elizabeth Flores.
El Partido Acción Nacional (PAN) ha hecho un llamado a legislar con consensos en el Congreso, destacando la importancia de encontrar puntos en común para avanzar en temas clave para el país. Sin embargo, el partido también ha dejado en claro que se consideran la “resistencia de México”, dispuestos a oponerse firmemente a cualquier medida que consideren contraria a los intereses de la nación.
La postura del PAN en el Congreso
El PAN, como una de las principales fuerzas de oposición en México, ha adoptado una estrategia dual: por un lado, aboga por la creación de consensos que permitan la aprobación de leyes que beneficien a la ciudadanía; por otro lado, advierte que no cederá ante presiones del gobierno o de otras fuerzas políticas que busquen imponer su agenda sin el debido debate y análisis.
Marko Cortés, líder del partido, ha subrayado la importancia de construir acuerdos que reflejen el sentir de la mayoría de los mexicanos, pero también ha sido claro en señalar que el PAN será la barrera de contención ante cualquier intento de vulnerar la democracia o los derechos de los ciudadanos.
Legislar con consensos: ¿una estrategia viable?
El llamado a legislar con consensos no es nuevo en la política mexicana, pero adquiere especial relevancia en un contexto donde la polarización y el enfrentamiento son la norma. El PAN propone una visión de diálogo y construcción conjunta, invitando a las demás fuerzas políticas a poner los intereses de México por encima de las diferencias partidistas.
No obstante, el partido también ha dejado claro que su rol como oposición no será pasivo. El PAN se autodenomina como la “resistencia de México”, un término que refleja su compromiso de frenar cualquier iniciativa que consideren perjudicial para el país. Esta dualidad de colaborar y resistir plantea un reto para la dinámica legislativa, donde los equilibrios de poder serán clave para la aprobación de reformas importantes.
¿Qué significa ser la “resistencia de México”?
El concepto de “resistencia de México” utilizado por el PAN es un llamado a la acción para sus bases y simpatizantes. En un panorama donde el gobierno federal tiene una mayoría significativa, el PAN se posiciona como el contrapeso necesario para evitar el abuso de poder. Esto implica un papel activo en la revisión y, si es necesario, en la obstrucción de políticas que consideren inadecuadas.
El partido ha enfatizado que su resistencia no es obstaculizar por obstaculizar, sino defender principios fundamentales como la libertad, la democracia y el Estado de derecho. En este sentido, se presentan como una fuerza que busca equilibrio y justicia en un entorno político cada vez más complejo.
