A pocos días de la toma de protesta de Claudia Sheinbaum como presidenta, la Cámara de Diputados en San Lázaro se encuentra completamente cercada. Desde el sábado, la Secretaría de Seguridad Ciudadana desplegó un operativo con vallas metálicas de más de dos metros y retenes en los principales accesos de la Alcaldía Venustiano Carranza. Este dispositivo de seguridad tiene como objetivo resguardar el evento del próximo 1 de octubre, donde se esperan 16 mandatarios internacionales.
Calles aledañas como Congreso de la Unión, Emiliano Zapata y Eduardo Molina fueron bloqueadas parcialmente, permitiendo solo el acceso peatonal. Además, cruces como Sidar y Molina fueron clausurados con camiones, al igual que otras zonas cercanas. Esta estrategia se asemeja a la implementada en las investiduras de Felipe Calderón en 2006 y Enrique Peña Nieto en 2012.
Por otro lado, el conflicto con los trabajadores del Poder Judicial, quienes se oponen a la reforma judicial aprobada recientemente, se mantiene latente. El paro de labores continuará durante la toma de protesta, mientras el Frente Cívico Nacional ha amenazado con realizar manifestaciones el día del evento.