Por Sharon Oropeza.
El Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez, en su 28ª edición, se vistió de colores y texturas en su segundo día de actividades, el jueves 15 de agosto. La jornada estuvo marcada por la riqueza cultural y la tradición del litoral Pacífico colombiano, con el pabellón de moda, estética y artesanías como el epicentro de una vibrante celebración.
El pabellón, que contó con la participación de más de 59 expositores, fue un homenaje viviente a la herencia afrocolombiana. Diseños únicos, vestimentas tradicionales, calzados elaborados con esmero y tejidos que cuentan historias ancestrales, se desplegaron ante los ojos de cientos de visitantes que no solo apreciaron, sino que también adquirieron piezas de artesanía llenas de historia y significado.
Una de las principales atracciones fue la escenografía de la pasarela, adornada con casas de palafito, estructuras típicas de las zonas costeras del Pacífico colombiano. Estas casas, creadas especialmente para el festival, serán donadas al finalizar el evento, con el objetivo de transformarlas en herramientas didácticas y culturales para niños y niñas en diferentes espacios.
Hugo Revhelo, uno de los diseñadores participantes, expresó su entusiasmo por la experiencia multisensorial que ofrecen estas construcciones: “Queremos que las personas conozcan de primera mano cómo viven las comunidades en estas regiones. Para ello, hemos involucrado a personas de la comuna 15 de Cali, en su mayoría afrodescendientes, en la construcción de estas casas, generando así oportunidades de inclusión y desarrollo en la ciudad.”
Además de las impresionantes exhibiciones de artesanías, el segundo día del festival también fue escenario para que dos destacados diseñadores afrocolombianos presentaran sus colecciones. Esteban Sinisterra, joven talento de 23 años y creador de la marca ‘Esteban África’, mostró sus últimos diseños, los mismos que han vestido a figuras de renombre como la vicepresidenta Francia Márquez. Sus creaciones no solo son un tributo a la mujer afrocolombiana, sino también un mensaje poderoso de resistencia y dignidad.
Por su parte, Enrique Mena, fundador de ‘Visaje Negro’, continuó sorprendiendo con su enfoque innovador en la moda sostenible. Utilizando fibras de piña, algodón reciclado y plástico de botellas PET, Mena refuerza su compromiso con el medio ambiente y la comunidad de Urabá, de donde proviene.
El Festival Petronio Álvarez sigue consolidándose como un espacio donde la cultura, la moda y la tradición afrocolombiana convergen, celebrando la identidad y la diversidad del Pacífico colombiano en cada uno de sus rincones.
