Por: Daniela Diaz
Después de que Donald Trump fuera declarado culpable por las acusaciones de la actriz Stormy Daniels, el matrimonio del magnate con Melania Trump, definitivamente tuvo consecuencias. Aunque no es oficial una ruptura, hay una brecha significativa entre la ex-pareja (¿o futura?) presidencial.
Melania Trump, nacida Melanija Knavs el 26 de abril de 1970 en Novo Mesto, Eslovenia (entonces parte de Yugoslavia), es una figura notable en la historia reciente de los Estados Unidos, principalmente conocida por su papel como Primera Dama durante la presidencia de su esposo, Donald Trump, de 2017 a 2021. Sin embargo, su vida y carrera abarcan mucho más allá de este período, ofreciendo una visión interesante de una mujer que ha sido modelo, madre y empresaria.
Primeros Años y Carrera como Modelo
Melania creció en la pequeña ciudad de Sevnica, en la actual Eslovenia. Desde joven, mostró interés por el mundo de la moda, un interés que la llevaría lejos de su hogar. A los 16 años, comenzó su carrera como modelo, y a los 18 firmó con una agencia de modelos en Milán. Su carrera la llevó a trabajar en varias capitales de la moda, incluyendo París y Nueva York, donde eventualmente se estableció.
Durante su tiempo en la industria de la moda, Melania trabajó con fotógrafos de renombre y apareció en diversas publicaciones de alto perfil. Su experiencia y éxito en este campo le proporcionaron una base sólida de confianza y habilidades que le serían útiles en sus roles futuros.
Matrimonio con Donald Trump
Melania conoció a Donald Trump en una fiesta de la Semana de la Moda en Nueva York en 1998. A pesar de una diferencia de edad significativa y de las miradas escépticas de algunos, la pareja se casó en una ceremonia lujosa en Palm Beach, Florida, en enero de 2005. Tienen un hijo en común, Barron William Trump, nacido en 2006.
Primera Dama de los Estados Unidos
El 20 de enero de 2017, Melania Trump se convirtió en la Primera Dama de los Estados Unidos, la primera nacida en el extranjero desde Louisa Adams en el siglo XIX. Su tiempo en este rol fue notable por varias razones. Primero, mantuvo un perfil relativamente bajo en comparación con algunas de sus predecesoras, eligiendo centrarse en su familia y en una plataforma específica de causas benéficas.
Su iniciativa más conocida como Primera Dama fue la campaña “Be Best”, lanzada en mayo de 2018. Esta campaña se enfocó en tres áreas principales: el bienestar de los niños, la seguridad en línea y la lucha contra el abuso de opioides. A pesar de recibir críticas y ser objeto de controversias, Melania se mantuvo firme en sus objetivos y trabajó para promover estas causas durante su tiempo en la Casa Blanca.
Estilo y Percepción Pública
Melania Trump también fue ampliamente reconocida por su estilo personal, que a menudo generaba titulares y discusiones. Sus elecciones de vestuario a menudo eran vistas como declaraciones silenciosas y a veces provocativas. Por ejemplo, su chaqueta con el mensaje “I really don’t care, do u?” (Realmente no me importa, ¿y a ti?) durante una visita a un centro de detención de niños inmigrantes generó un amplio debate sobre sus intenciones y mensajes subyacentes.
Vida Después de la Casa Blanca
Desde que dejó la Casa Blanca en enero de 2021, Melania Trump ha mantenido un perfil bajo. Se ha centrado en su familia y en sus intereses personales, evitando en gran medida la escena pública y política. Sin embargo, su impacto y legado como Primera Dama continúan siendo temas de interés y discusión.
Melania Trump es una figura compleja y multifacética cuya vida abarca mucho más que su papel como Primera Dama. Desde sus humildes comienzos en Eslovenia hasta su carrera como modelo internacional y su tiempo en la Casa Blanca, Melania ha navegado por su camino con una mezcla de gracia, determinación y, en ocasiones, controversia. Su legado es una mezcla de elegancia, dedicación a causas específicas y una percepción pública que sigue evolucionando.