Por Alan Benitez
Los periquitos, pequeños loros conocidos por su vivaz personalidad y brillantes colores, poseen una habilidad que los convierte en fascinantes compañeros: son excelentes imitadores de palabras y sonidos de su entorno. Esta destreza los destaca entre las mascotas más populares del mundo.
La capacidad de imitación de los periquitos no es una casualidad. Estos loros tienen un sistema vocal altamente desarrollado que les permite captar y repetir sonidos con notable precisión. Aunque su tamaño es mucho más pequeño que el de otros loros famosos por hablar, como los guacamayos o los loros grises, los periquitos no se quedan atrás cuando se trata de aprender y repetir palabras.
Esta habilidad para imitar sonidos depende, en gran medida, del entorno en el que se encuentren. Los periquitos que crecen rodeados de humanos tienen más probabilidades de repetir frases comunes, como saludos o nombres. A través de la repetición y el entrenamiento, estos pequeños loros pueden incluso aprender a “cantar” fragmentos de canciones o imitar ruidos cotidianos, como el timbre del teléfono o el sonido de una campana.
Lo interesante de estos pájaros es que, aunque no entienden el significado de las palabras que repiten, su capacidad de imitación refleja una inteligencia social significativa. Son animales curiosos y altamente receptivos a lo que sucede a su alrededor, lo que los convierte en fascinantes sujetos de estudio sobre el aprendizaje vocal en aves.