Por Alan Benitez
Los hámsters no solo son conocidos por ser tiernas mascotas, sino también por su sorprendente habilidad para almacenar grandes cantidades de comida en sus mejillas. Estas bolsas expansibles les permiten cargar hasta la mitad de su cuerpo en alimento, un comportamiento natural que les ayuda a sobrevivir en la naturaleza.
Una de las características más curiosas de los hámsters es su capacidad de almacenar comida en sus mejillas. Estos roedores poseen bolsas internas que pueden extenderse desde la boca hasta la parte trasera de la cabeza, permitiendo que guarden grandes cantidades de alimento, como semillas, frutas o vegetales.
Este mecanismo les permite recolectar comida rápidamente y transportarla de forma eficiente a sus madrigueras, donde la almacenan para consumirla más tarde. En la naturaleza, esta habilidad es crucial, ya que viven en ambientes donde el alimento puede ser escaso. Los hámsters domésticos conservan este comportamiento, escondiendo comida en su jaula, incluso cuando tienen acceso constante a alimento.
Lo más impresionante es que estas bolsas extensibles pueden llegar a ocupar hasta la mitad del cuerpo del hámster, una característica que no solo les sirve para almacenar comida, sino que también los convierte en mascotas fascinantes para quienes disfrutan observar su ingenioso comportamiento.
Este adorable hábito de los hámsters ha generado gran interés entre los dueños de mascotas, quienes a menudo se sorprenden de la gran cantidad de comida que sus pequeños amigos pueden almacenar en sus mejillas antes de llevarla a su escondite.