Por: Fran Chico.
Cada viernes, Netflix estrena una nueva película ‘original’ en su plataforma, y cada lunes, esa misma película aparece en la cima del ranking de contenidos más vistos. La temática, los protagonistas y las críticas, tanto de la prensa como de los espectadores, parecen ser detalles secundarios. Esta tendencia, en parte, puede atribuirse a la estrategia de promoción de Netflix, que destaca los estrenos en la página principal de la plataforma. La curiosidad por los nuevos lanzamientos y la inmediatez del clic suelen superar el deseo de buscar más información.
Este fin de semana, la nueva película en el centro de atención es La liberación (conocida como La salvación en Latinoamérica), que ha alcanzado el primer puesto en el catálogo de Netflix a pesar de contar con un modesto 30% de críticas positivas en Rotten Tomatoes. La película, inspirada en hechos reales, está dirigida por el nominado al Oscar Lee Daniels y cuenta con un elenco impresionante que incluye a las nominadas al Oscar Andra Day, Aunjanue Ellis-Taylor, Glenn Close (con 8 nominaciones sin estatuilla) y Mo’Nique, quien ganó el Oscar en 2010 por Precious, también dirigida por Daniels.
En teoría, La liberación debería ofrecer una experiencia cinematográfica impactante: un drama sobre una madre soltera que lucha por mantener a sus hijos en una casa encantada. Sin embargo, el resultado final se aleja de esta promesa. La película mezcla elementos de horror y drama con una denuncia social errática que termina por desaprovechar el talento de su elenco. En lugar de una exploración profunda, La liberación recurre a tópicos del cine de terror de manera aleatoria.
La historia real en la que se basa, la de Latoya Ammons, una madre soltera que se mudó a Indiana en 2011 con sus tres hijos, ofrece un trasfondo intrigante. Ammons experimentó fenómenos extraños en su hogar, como la presencia inusual de insectos, olores raros y ruidos inexplicables. Lo más alarmante fue el cambio en el comportamiento de su hijo menor de 9 años, quien mostró signos de violencia extrema, hablaba en idiomas extraños y, según algunos testigos, incluso llegó a levitar en una fiesta de cumpleaños. Después de consultar a varios médicos y sacerdotes, Ammons vivió hasta tres exorcismos en un intento por resolver la situación.
En los créditos finales, La liberación mantiene el misterio: “A día de hoy, todavía se siguen reportando sucesos extraños alrededor de la propiedad…” ¿Te atreves a descubrirlo por ti mismo?