
Por Frida Rebollar.
La cocina mexicana es una de las más ricas y variadas del mundo, reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Cada estado del país tiene sus propias especialidades, muchas de ellas con raíces prehispánicas y otras influenciadas por ingredientes traídos durante la colonización.
A continuación, presentamos algunos de los platillos más representativos de cada estado:
- Yucatán: La cochinita pibil, carne de cerdo marinada en achiote y cocida en horno de tierra, es un ícono de la región.
- Oaxaca: El mole negro es el más famoso de sus siete moles, con una compleja mezcla de chiles, chocolate y especias.
- Puebla: Los chiles en nogada, rellenos de picadillo y bañados en salsa de nuez, son símbolo de la gastronomía poblana.
- Jalisco: La birria, de chivo o res, es un platillo tradicional acompañado de tortillas y caldo especiado.
- Baja California: Su cocina se destaca por la langosta estilo Puerto Nuevo, frita y servida con arroz y frijoles.
México cuenta con una diversidad culinaria que refleja su historia, geografía y cultura. Cada platillo no solo es un deleite para el paladar, sino también un reflejo de la identidad de su estado de origen.