Jurassic World: El reino caído no escatimó en gastos ni en ambición, siendo la segunda película más costosa de la historia, con un presupuesto asombroso de 432 millones de dólares. Aunque recaudó más de 1,300 millones a nivel mundial, superando ampliamente su inversión, la película no cumplió con las expectativas de la crítica ni del público más exigente.
Esta secuela de Jurassic World lleva nuevamente a los protagonistas Claire Dearing (Bryce Dallas Howard) y Owen Grady (Chris Pratt) de regreso a Isla Nublar, pero esta vez con una misión diferente: salvar a los dinosaurios de una nueva extinción, provocada por la inminente erupción de un volcán. Sin embargo, la pareja pronto descubre que no son los únicos con interés en estas criaturas prehistóricas, ya que otras fuerzas intentan manipular la situación para sus propios fines.
A pesar de que la saga Jurassic Park y Jurassic World iniciaron con gran éxito, especialmente entre los fanáticos de los dinosaurios, las secuelas han tenido una recepción más tibia. En sitios como Rotten Tomatoes y Metacritic, Jurassic World: El reino caído no logró convencer del todo a la crítica. Sin embargo, para los estudios esto fue un éxito financiero rotundo, habiendo duplicado con creces su gigantesco presupuesto.
Esta entrega, disponible hoy en Prime Video, sigue siendo una pieza clave en el legado de una de las franquicias más legendarias de la ciencia ficción y el cine de aventuras. Para los fans de los dinosaurios y las películas de gran escala, Jurassic World: El reino caído ofrece acción, efectos visuales impresionantes y un viaje de nostalgia a la era jurásica.
