Por Frida Rebollar.
La tensión en Medio Oriente vuelve a escalar luego de que el gobierno de Israel advirtiera que la continuidad del cese al fuego en Gaza depende de la liberación de tres rehenes israelíes por parte de Hamás antes del próximo sábado.
El portavoz del gobierno israelí, David Mencer, fue contundente al señalar que, si los cautivos no son entregados antes del mediodía, la tregua llegará a su fin. “Es un punto innegociable dentro del acuerdo vigente”, afirmó.
La tregua, iniciada el 19 de enero, ha permitido hasta ahora cinco intercambios de rehenes israelíes por prisioneros palestinos. No obstante, Hamás anunció esta semana que retrasará el próximo canje hasta que Israel cumpla con compromisos previos, lo que ha complicado más las negociaciones.
Egipto y Qatar han intervenido para destrabar el estancamiento, logrando que Hamás reafirme su disposición a respetar el pacto. Sin embargo, la situación se volvió más tensa luego de que el ejército israelí atacara un lanzacohetes en Gaza, en respuesta a un presunto disparo desde ese punto.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ya ha advertido que si no se cumple con la entrega de los rehenes, la ofensiva militar en la Franja de Gaza se intensificará.
Mientras tanto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aguantó su postura y advirtió que, de no concretarse la liberación de los cautivos, habrá serias consecuencias. “Si no liberan a todos los rehenes, se desatara un infierno”, sentenció.
