El Allianz Arena de Múnich será el escenario de una batalla futbolística que promete quedar en los libros. Este sábado, el Inter de Milán y el Paris Saint-Germain se enfrentarán en la gran final de la UEFA Champions League.
Por un lado, el equipo italiano llega con hambre de gloria y con la mirada puesta en su cuarta “Orejona”. La última vez que los nerazzurri levantaron el trofeo fue en 2010, bajo la dirección de José Mourinho. Ahora, con una plantilla renovada, sólida en defensa y con un ataque eficaz, los de Milán buscarán repetir la hazaña y devolver el prestigio europeo al club.

En la otra esquina está el PSG, que sigue persiguiendo su primera Champions. Pese a contar con inversiones millonarias y estrellas mundiales, el conjunto parisino no ha logrado coronarse en este torneo. Esta final representa una oportunidad histórica para acabar con ese estigma y escribir un nuevo capítulo en su historia.
Ambos equipos han llegado tras superar fases complejas y dejar atrás a potencias europeas. La final promete emociones intensas, duelos de alto nivel y, quizás, una consagración largamente esperada para uno de los dos.