Por Valeria Vázquez
Rosé buscó personalmente a Bruno Mars para colaborar en APT. , una canción inspirada en un popular juego de beber en Corea del Sur. El tema fusiona ritmos pegajosos con la inconfundible energía del artista estadounidense, logrando récords históricos en su lanzamiento. “Nunca imaginé que explotaría de esta manera. Me encanta ver a la gente bailándola en TikTok, haciendo desafíos … Es como si la canción hubiera cobrado vida propia”, comentó con entusiasmo.
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Pese al éxito, la cantante tuvo dudas antes de lanzar el sencillo. “No estaba segura de mencionar el juego de beber tan explícitamente. Me preguntaba si la gente lo entendería”, admitió. Sin embargo, la respuesta del público demostró que la apuesta valió la pena.
Rosé también habló sobre su crecimiento personal y profesional. Aunque extraña la dinámica de BLACKPINK, donde las decisiones eran compartidas, está disfrutando de la libertad creativa que le brinda su carrera en solitario. “Cada letra, cada sonido, me representa al 100%”, afirmó.
Sobre el futuro, el artista mantiene la mente abierta y hasta considera incursionar en el teatro musical. “Si algún día sucede, necesitarán una actriz asiática, rubia, que hable coreano e inglés con acento australiano”, bromeó. Lo que sí tiene claro es que quiere seguir explorando su arte sin perder su esencia. “No quiero ser una versión fabricada de lo que otros esperan. Prefiero mostrarme tal como soy, con mis miedos, mis alegrías y mis contradicciones”, concluyó.