Por Marco Reyes
Osmar Olvera, el clavadista mexicano, concluyó su participación en la súper final de la Copa del Mundo en China, llevándose a casa dos medallas de plata, marcando así el final de su experiencia internacional. Ahora, inicia un emocionante proceso de preparación de cara a los Juegos Olímpicos de París 2024.
“Es emocionante enfocarnos en mejorar día a día y identificar qué aspectos necesitamos perfeccionar para alcanzar la excelencia. Son los pequeños detalles los que marcan la diferencia”, comentó Olvera al regresar a México.
Aunque reconoce a los clavadistas chinos como sus principales rivales, Olvera demostró en el Campeonato Mundial y en las copas del Mundo que puede competir y superarlos, aunque no baja la guardia. “Mi meta es superar los 500 puntos para luchar por el oro. Es lo que estoy entrenando y enfocándome en lograr. Se puede vencerlos, no es imposible”, aseguró el deportista.
Respecto a su lista de clavados, Olvera anticipó que no habrá cambios significativos y que discutirá cualquier ajuste con su entrenadora, Ma Jin. Sus ejecuciones le han valido cinco medallas -cuatro platas y un bronce- en el circuito de copas, un logro que considera crucial de cara a los Juegos Olímpicos.
A pesar de tener ya su clasificación a París 2024 en trampolín de 3 metros sincronizado e individual, Olvera aún espera confirmar la presencia de su entrenadora en el evento. “Espero que Ma Jin pueda acompañarme en la competencia más importante de mi vida. Confío en que todo saldrá bien”, compartió el clavadista.
Olvera es uno de los candidatos para portar la bandera mexicana en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos, una posibilidad que le ilusiona profundamente. “Sería un honor y un placer, pero la decisión está en manos de otros”, concluyó.
