La conversación sobre la inclusión de los deportes electrónicos en los Juegos Olímpicos ha ido ganando fuerza, y EA Sports podría jugar un papel clave si esto se hace realidad. Con el auge de los esports a nivel global, juegos como FIFA, desarrollados por EA Sports, se posicionan como posibles candidatos para unirse al programa olímpico, marcando un hito en la historia de las competiciones deportivas.
En 2021, el Comité Olímpico Internacional (COI) ya exploró el potencial de los esports al organizar las Olympic Virtual Series, aunque sin la inclusión de títulos de EA Sports. Sin embargo, la popularidad mundial de FIFA lo convierte en una opción natural para futuras ediciones, especialmente considerando su relevancia en el ámbito del fútbol, uno de los deportes más universales.
La participación de EA Sports en los Juegos Olímpicos no solo traería un nuevo nivel de prestigio a los esports, sino que también contribuiría a legitimar esta forma de competencia en el mundo deportivo tradicional. Además, abriría las puertas a otros títulos como Madden NFL o NBA Live, ampliando la presencia de los videojuegos en un evento que hasta ahora ha estado dominado por disciplinas deportivas convencionales.
Aunque hay desafíos, como unificar reglas y asegurar la equidad en la competencia, la posibilidad de ver a EA Sports en los Juegos Olímpicos representa una evolución significativa para los esports. Si se concreta, estaríamos ante un nuevo capítulo en la historia de los videojuegos, que pasarían de ser entretenimiento a ser reconocidos como deportes olímpicos oficiales.
