Por Valeria Vázquez
El Athletic Club vivió una de sus peores tardes en Europa tras caer goleado por el Besiktas en Estambul. La derrota, la primera en esta competición para los de Ernesto Valverde, expuso las debilidades de un equipo relajado que pagó caro su falta de tensión.
El Besiktas, revitalizado bajo la dirección de Ole Gunnar Solskjaer, desbordó constantemente a la defensa rojiblanca gracias a la velocidad de jugadores como Rafa Silva, Rashica y Muçi. A pesar de que Unai Gómez logró el empate al cierre del primer tiempo, los turcos retomaron el control con contragolpes letales que culminaron en goles de Rashica, Rafa Silva y un penalti de Joao Mario en el descuento.
El encuentro dejó secuelas para el Athletic, no solo por el marcador, sino también por la lesión de Galarreta, quien apenas pudo disputar unos minutos tras entrar desde el banquillo.
A pesar de este tropiezo, los bilbaínos aún tienen opciones de avanzar a los cuartos de final en su último partido frente al Viktoria Plzen en San Mamés.
