10 de octubre de 2024 – El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó su intención de declarar el estado de emergencia nacional una vez que asuma el cargo el próximo 20 de enero. Su plan incluye el uso de recursos militares, como el Ejército y la Guardia Nacional, para llevar a cabo deportaciones masivas de migrantes indocumentados en el país.
A través de su cuenta oficial en la plataforma Truth Social, Trump respaldó las declaraciones de Tom Fitton, director de Judicial Watch, quien afirmó que el futuro gobierno republicano combatirá lo que calificó como una “invasión migratoria” propiciada por el actual mandatario, Joe Biden. “¡Es verdad!”, respondió Trump al mensaje.
Según las leyes estadounidenses, la Guardia Nacional puede ser utilizada en emergencias nacionales para proteger al país, ya sea ante conflictos, desastres naturales o amenazas a la seguridad. La declaración de estado de emergencia permitirá a Trump reubicar recursos federales para implementar sus políticas migratorias, generando un debate nacional sobre los derechos humanos y la legalidad de estas acciones.
Este polémico anuncio ha causado preocupación entre las comunidades migrantes, organizaciones defensoras de derechos humanos y gobiernos extranjeros, que temen un endurecimiento sin precedentes en la política migratoria de Estados Unidos.
