Por Valeria Vázquez
En la reciente sesión del Congreso, los diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI) votaron en contra de la reforma constitucional propuesta por Morena, la cual busca eliminar la posibilidad de presentar juicios de amparo, acciones de inconstitucionalidad y controversias constitucionales. Los legisladores del PRI argumentan que esta iniciativa podría afectar la defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos mexicanos.
La reforma plantea modificaciones a los Artículos 105 y 107 de la Constitución, estableciendo que estos recursos serán improcedentes en relación con las adiciones o reformas a la Carta Magna. Los diputados del PRI consideran que esto representaría un retroceso en el acceso a la justicia y la protección de los derechos humanos.
Durante la discusión, el PRI presentó una Moción Suspensiva, señalando que la propuesta contraviene el principio de convencionalidad y viola el proceso legislativo al no cumplir con los plazos reglamentarios. La bancada tricolor destacó la importancia de mantener mecanismos jurídicos que permitan corregir o detener posibles abusos en la aprobación de modificaciones constitucionales.
El PRI subraya que la eliminación de la posibilidad de impugnar reformas constitucionales podría debilitar el sistema de pesos y contrapesos, concentrando el poder en manos del oficialismo. Este contexto genera preocupación sobre la protección de los derechos humanos y las libertades de los ciudadanos.