Cuidemos nuestros riñones: Día Mundial del Riñón

Por: Dr. Raúl Zenteno Langle

Mi camino hacia la nefrología

Cuando estudiaba medicina, quería ser cirujano. Pero al hacer mis rotaciones en el internado, descubrí que la medicina interna era lo mío. Luego, mientras exploraba distintas especialidades, encontré la nefrología, un área fascinante que abarca enfermedades como la las propias del riñón, diálisis, trasplantes y tratamientos de mínima invasión.

Cada año, el Día Mundial del Riñón se celebra el 9 de marzo para recordar la importancia de cuidar nuestros riñones, prevenir y tratar enfermedades renales tales como, enfermedades glomerulares, cálculos renales y enfermedades genéticas del riñón. Al no tratar estas enfermedades, entonces el paciente llega a enfermedad renal crónica, siendo una entidad creciente y un problema de salud pública que va en aumento.

La enfermedad renal crónica: un problema que va en aumento

La enfermedad renal crónica (ERC) ocurre cuando los riñones pierden su capacidad de funcionar correctamente por más de tres meses. Es un problema de salud creciente que afecta al 10% de la población mundial, es decir, a más de 800 millones de personas.

¿Por qué es tan grave?

• Entre 1990 y 2017, la mortalidad por ERC aumentó en un 41.5%.

• Se estima que para 2040, será la quinta causa de muerte en el mundo.

• En México, para el 2025, podrían morir 160,000 personas por esta enfermedad.

¿Es costoso el tratamiento?

Sí, tratar la ERC avanzada es muy caro. En 2017, los costos anuales por paciente fueron:

• Diálisis peritoneal: $465,485 pesos.

• Hemodiálisis: $783,780.44 pesos.

Por eso, prevenir y detectar la enfermedad a tiempo es clave.

¿Quiénes tienen más riesgo de sufrir enfermedad renal?

Algunas personas tienen más probabilidades de desarrollar ERC, por lo que deben cuidarse más y hacerse chequeos regulares. Entre los factores de riesgo más importantes están:

✔ Diabetes Mellitus tipo 2 (DM2): La causa principal de ERC.

✔ Hipertensión arterial: Si no se controla, daña los riñones rápidamente.

✔ Edad avanzada: El riesgo aumenta con la edad, especialmente después de los 70 años.

✔ Mujeres y genética: Es más común en mujeres debido a la pérdida de estrógenos. Además, enfermedades hereditarias, como la poliquistosis renal, aumentan el riesgo.

✔ Enfermedades crónicas: Personas con VIH, hepatitis C, cáncer o antecedentes de nefrotoxicidad.

✔ Cálculos renales recurrentes: Pueden causar daño renal con el tiempo.

¿Cómo detectar la enfermedad renal a tiempo?

Muchas personas no presentan síntomas hasta que el daño en los riñones es grave. Por eso, es importante realizarse estudios de laboratorio si tienes algún factor de riesgo.

Pruebas para evaluar la función renal

• Creatinina sérica y nitrógeno ureico en sangre.

• Examen general de orina para detectar proteínas o sangre.

• Medición de albúmina en orina, en una muestra al azar o en recolección de 24 horas.

¿Y en los adultos mayores?

El diagnóstico puede ser más difícil porque el envejecimiento natural del riñón puede dar resultados alterados en algunos estudios. Para mayor precisión, se recomienda medir cistatina C sérica, además de creatinina y adaptarlo de acuerdo al contexto clínico del paciente.

¿Cómo se trata la enfermedad renal crónica?

El tratamiento depende del grado de daño en los riñones y tratar la causa en etapas tempranas. En etapas avanzadas, se necesitan terapias de reemplazo renal, como:

1. Hemodiálisis

✔ Se usa un catéter en una vena grande.

✔ Se extrae la sangre, se limpia y se devuelve al cuerpo.

2. Diálisis peritoneal

✔ Se coloca un catéter en el abdomen.

✔ Se usa el peritoneo como filtro para eliminar toxinas y líquidos.

Ambas opciones son efectivas, pero ninguna ha demostrado ser mejor que la otra.

¿Cómo prevenir la enfermedad renal crónica?

Lo mejor que podemos hacer es cuidar nuestros riñones con hábitos saludables:

✔ Controla tu presión arterial y azúcar en sangre.

✔ Come saludablemente: más frutas, verduras y pescado.

✔ Duerme bien: entre 7 y 9 horas diarias.

✔ Mantén un peso saludable.

✔ Haz ejercicio: al menos 150 minutos de actividad moderada a la semana o 60 minutos de ejercicio intenso.

La enfermedad renal crónica es silenciosa. Si esperas a tener síntomas, el daño ya puede ser grave. Si tienes factores de riesgo, consulta a un nefrólogo y hazte estudios de prevención.

Recuerda: cuidar tus riñones es cuidar tu vida. ¡Haz conciencia!

Noticias recientes

Related articles

¿Tienes un evento social en puerta?

spot_imgspot_img