La muerte de una mascota puede ser una de las experiencias más dolorosas para quienes comparten su vida con animales. Este duelo, aunque único, puede ser tan intenso como el de perder a un ser querido. Decidir cuándo es el momento adecuado para tener otra mascota es una decisión compleja que debe abordarse con responsabilidad y empatía.
El duelo: un proceso necesario antes de tener otra mascota
Es fundamental permitir que el proceso de duelo siga su curso antes de incorporar un nuevo animal al hogar. Según Jaume Fatjó, especialista en etología, “el duelo tiene diferentes fases y su duración depende de cada persona, pero hasta que no se completa, no es recomendable adoptar otra mascota”.
Cada persona experimenta este proceso de manera distinta. Mientras que para algunos tener un nuevo compañero puede ser reconfortante, para otros podría intensificar su dolor o generar rechazo hacia el nuevo animal. “La clave está en no tomar decisiones impulsivas para llenar el vacío, sino esperar a sentirse emocionalmente preparado”, añade Fatjó.
Evitar presiones externas
En algunos casos, familiares o amigos sugieren adoptar otra mascota como una forma de “sanar” más rápido. Sin embargo, forzar esta decisión o aceptar una nueva mascota impuesta puede ser contraproducente tanto para la persona como para el bienestar del animal.
Crear un vínculo sano con una nueva mascota
Míriam Pérez, máster en Etología Aplicada, subraya la importancia de no buscar reemplazar al animal que falleció: “Cada mascota tiene su carácter único. Aceptar el duelo y recordar con amor al animal que se ha ido es crucial para establecer una relación positiva con el nuevo”.
Tómate el tiempo necesario para reflexionar sobre si estás preparado emocionalmente. Cada relación con una mascota es única, y forzar la llegada de otra antes de tiempo puede dificultar el proceso de duelo.