Corea del Norte destruye carreteras y vías férreas hacia el sur para cortar lazos con Corea del Sur

Por Sofia Swindall

Corea del Norte ha detonado este martes varias secciones de las carreteras y líneas ferroviarias que conectaban su territorio con Corea del Sur, en una acción que refuerza su objetivo de “separar completamente” ambos países. Estas vías, construidas en la frontera fuertemente militarizada, nunca llegaron a usarse, pues estaban pensadas para una futura reunificación.

Este acto llega en un momento de alta tensión entre las dos Coreas, que se acusan mutuamente de acciones hostiles. Corea del Norte ya había anunciado su plan de destruir las rutas y acusa a Corea del Sur de enviar drones sobre su territorio para difundir propaganda. En respuesta, Kim Yo Jong, hermana del líder norcoreano Kim Jong-un, amenazó con represalias, asegurando que Corea del Sur “pagará un alto precio” por las supuestas incursiones aéreas. Mientras tanto, Seúl no ha confirmado si los drones fueron enviados por el gobierno o por activistas independientes.

Con la destrucción de estas líneas de comunicación terrestre, el líder norcoreano reafirma su rechazo a la idea de una reunificación pacífica, un objetivo que fue defendido por sus antecesores, Kim Il-sung y Kim Jong-Il.

Las explosiones se llevaron a cabo en rutas ubicadas en la parte norte de la frontera, que fueron construidas en momentos de acercamiento entre los dos países. Imágenes del ejército surcoreano muestran columnas de humo y equipos norcoreanos trabajando en la zona. Este acto forma parte de la estrategia de Kim Jong-un para cortar los pocos vínculos que aún existen con Corea del Sur y fortalecer sus defensas en la frontera.

La semana pasada, Corea del Norte ya había advertido que destruiría estas rutas como parte de su plan de consolidar un sistema de “dos Estados”, lo que marca la primera vez desde su fundación en 1948 que el régimen comunista renuncia al objetivo de la reunificación.

En reacción, las fuerzas armadas surcoreanas emitieron disparos de advertencia cerca de la frontera, aunque no se registraron daños. El Ministerio de Unificación de Corea del Sur condenó la destrucción de las vías como una “medida anormal” y un retroceso en los acuerdos intercoreanos. Además, recordaron que estas rutas fueron construidas con fondos surcoreanos, que ascendieron a más de 132 millones de dólares en préstamos que Corea del Norte nunca devolvió.

Seúl también está evaluando posibles acciones diplomáticas y legales en respuesta a la violación de los acuerdos intercoreanos. Además, el gobierno local de Gyeonggi, una provincia fronteriza con el Norte, ha reforzado la vigilancia para evitar el envío de panfletos propagandísticos hacia Corea del Norte, una práctica que ha aumentado las tensiones en años recientes.

La relación entre las dos Coreas sigue marcada por la Guerra de Corea, que terminó en 1953 sin un tratado de paz definitivo. Durante un periodo de acercamiento en la década de 2000, se reabrieron algunas rutas, pero estos proyectos quedaron en gestos simbólicos, ya que la frontera nunca se abrió por completo. La destrucción actual de las vías es vista como una escalada en las tensiones, siguiendo un patrón que Corea del Norte ha repetido en el pasado, como en 2020 cuando volaron la oficina de enlace intercoreana tras el fracaso de las negociaciones nucleares con Estados Unidos.

Este nuevo movimiento de Corea del Norte refuerza la idea de que Seúl ya no es un socio para la reunificación, sino un enemigo permanente, mientras que el régimen de Kim busca centrarse en negociaciones directas con Estados Unidos, dejando de lado los intentos de reconciliación con el Sur.

Noticias recientes

Related articles

¿Tienes un evento social en puerta?

spot_imgspot_img