Por Diana Silva
La reciente puesta en escena de “Romeo y Julieta” en el Teatro Duke of York de Londres, dirigida por Jamie Lloyd, ha generado revuelo tanto en la crítica teatral como en las redes sociales. A pesar de contar con llenos totales en sus funciones iniciales, la reacción en línea ha sido mixta, especialmente en lo que respecta a la elección de la protagonista, Francesca Amewudah-Rivers.
La decisión de castear a Amewudah-Rivers, una actriz de ascendencia ghanesa, para el icónico papel de Julieta, ha suscitado críticas y debates sobre la inclusión en el teatro contemporáneo. Algunos usuarios en redes sociales expresaron su descontento, argumentando que esta elección forma parte de una estrategia de inclusión forzada, comparando la situación con la controversia surgida en torno a Halle Lynn Bailey, quien interpretó a Ariel en la adaptación live action de “La Sirenita” de Disney.
La crítica se centra en la percepción de que se está dando protagonismo a actores cuya apariencia no coincide con las características estéticas de los personajes de las obras originales. Sin embargo, cabe destacar que esta crítica no se ha extendido al actor Tom Hollan, quien interpreta a Romeo en la misma producción.
En medio de las opiniones negativas, varias artistas de color han salido en defensa de Amewudah-Rivers, señalando que el papel de Julieta fue interpretado por primera vez por un hombre, lo que desafía la noción de cánones estéticos predefinidos. A pesar de ello, las críticas persisten, con algunos usuarios manifestando su rechazo hacia el espectáculo en general.
Hasta el momento, Francesca Amewudah-Rivers no ha emitido comentarios públicos sobre la controversia.
Es importante recordar que “Romeo y Julieta” es una obra emblemática de la literatura universal y ha sido objeto de numerosas adaptaciones a lo largo de la historia, algunas de las cuales han explorado y desafiado las convenciones étnicas establecidas en la obra original.
La productora de “Romeo y Julieta” ha respaldado públicamente a Francesca Amewudah-Rivers frente a las críticas y abusos recibidos en línea. En un comunicado, la compañía denunció el abuso racial dirigido hacia la actriz y expresó su apoyo incondicional, destacando su talento artístico y su valía en el proyecto teatral.
Con esta polémica, se reabre el debate sobre la inclusión y la diversidad en el teatro contemporáneo, subrayando la importancia de abordar estas cuestiones en la industria del entretenimiento.