Una novia en Florida vivió un momento inesperado en su camino al altar: fue detenida por la policía debido al exceso de velocidad del vehículo en el que viajaba. El episodio, registrado por la cámara corporal de un oficial, rápidamente se difundió en redes sociales, captando la atención de miles de usuarios.
El incidente ocurrió el viernes 11 de abril, cerca de las 2:42 p.m., en la ciudad de Port St. Lucie. Una patrulla de la policía local detectó un automóvil que circulaba a 169 km/h en la Crosstown Expressway, una vía urbana donde el límite es significativamente menor. Al detener el vehículo, el agente constató que el conductor era un invitado a una boda y que, como pasajera, viajaba la futura esposa, vestida para la ceremonia.
En el video publicado en Facebook e Instagram oficiales, se ve al oficial acercándose y preguntando directamente: “¿De quién es la boda?” A lo que la mujer responde, algo nerviosa: “Es mía”. El enlace estaba programado para las 2:30 p.m. en Stuart, a unos 16 kilómetros de distancia, un trayecto que, bajo condiciones normales de tráfico, requiere al menos 25 minutos.
Pese a la gravedad de la infracción, el oficial decidió no demorar más a los protagonistas y permitió que siguieran hacia su destino, aunque no sin advertirles que deberían presentarse obligatoriamente en la corte. “Voy a darte una citación para comparecer ante un juez”, explicó el policía antes de dejarlos partir.
El Departamento de Policía de Port St. Lucie acompañó el video viral con un comentario humorístico: “Esta detención le da un nuevo significado a correr hacia el altar”, bromeó la institución en redes sociales. También jugaron con el tradicional dicho de que la lluvia trae suerte en una boda, señalando que en este día soleado, el conductor ganó, además del casamiento, una cita con el tribunal.
