La preocupación por la seguridad de las mujeres en el Metro de la Ciudad de México va en aumento. Colectivos feministas, ciudadanas y miembros del Partido Acción Nacional (PAN) exigen que el Gobierno capitalino declare de inmediato una Alerta de Género, tras una serie de denuncias por intentos de secuestro en distintas estaciones del Sistema de Transporte Colectivo.
Las víctimas han señalado que los agresores utilizan jeringas o sustancias químicas para atacar, especialmente en puntos de alta afluencia como Revolución, Indios Verdes, La Merced, Pantitlán y Zócalo. El patrón de estos ataques, cada vez más repetido, ha encendido las alarmas entre las usuarias, quienes ya no se sienten seguras al usar el Metro.
“Esta situación es crítica. No hay vigilancia ni presencia policial suficiente. Las mujeres vivimos con miedo cada día que usamos el Metro”, expresó Luisa Gutiérrez, presidenta del PAN en la capital. Por su parte, Ámbar Reyes, secretaria de Promoción Política de la Mujer del mismo partido, denunció que el Gobierno ha ignorado estas alertas: “Nos están intentando secuestrar y el gobierno hace como si nada pasara”.

El diputado federal Federico Döring también criticó la gestión del sistema de transporte, al afirmar que “el Metro debería estar bajo vigilancia las 24 horas, especialmente en los horarios nocturnos cuando más mujeres son acechadas”.
El PAN capitalino insiste en que Clara Brugada debe destituir a Guillermo Calderón, actual titular del Metro, y dejar de encubrir irregularidades. “Este problema va más allá de fallas técnicas: hay una crisis de seguridad que pone en riesgo a miles de mujeres cada día”, concluyeron.