
El futuro compañero de Max Verstappen en Red Bull podría definirse pronto, y el nombre de Yuki Tsunoda cobra fuerza. Según fuentes como Erik van Haren, la decisión ya está tomada y solo falta concretar los detalles. Mientras tanto, Zak Brown, jefe de McLaren, ha criticado la gestión de la escudería austriaca con el piloto japonés, considerando que él debería haber ocupado el asiento de Liam Lawson. En respuesta a los comentarios del directivo, Tsunoda se mostró agradecido, aunque sin perder la perspectiva: “Aprecio lo que Zak dijo en la prensa, pero es solo una carrera”.
Sin miedo al desafío de Red Bull
Diferentes voces en la Fórmula 1, como Ralf Schumacher, han advertido sobre los riesgos de dar el salto a Red Bull, equipo conocido por su exigencia con los pilotos. Sin embargo, Tsunoda no se deja intimidar y confía en su capacidad para afrontar el reto. Cuando le preguntaron si estaría preparado para subirse al RB21 de inmediato, su respuesta fue contundente: “Sí, por qué no. Siempre”. Incluso si el cambio se diera antes de la próxima carrera, en Suzuka, su confianza es total: “¿En Japón? Sí, al 100 %. Al final, el coche es más rápido”.
A pesar del optimismo, el japonés reconoce que la incertidumbre sobre su futuro puede ser una distracción: “Es positivo, pero al mismo tiempo, simplemente tengo que seguir haciendo lo que estoy haciendo”. La posibilidad de que Red Bull retrase la decisión podría afectar su desempeño con Racing Bulls en su carrera de casa, dejándolo en una posición complicada mientras la directiva toma una resolución.
Red Bull y la difícil situación de Liam Lawson
El RB21 sigue presentando algunas dificultades, heredadas de su versión anterior. No obstante, Max Verstappen ha sabido exprimir el potencial del monoplaza, lo que lo mantiene segundo en la clasificación con 36 puntos. Según el medio ‘De Telegraaf’, el neerlandés no estaría del todo convencido de cambiar de compañero en este momento de la temporada.
Por otro lado, la continuidad de Liam Lawson en el equipo ha quedado en entredicho. Tras un inicio de temporada irregular, con un abandono en Australia y un rendimiento discreto en China, el neozelandés está en la cuerda floja. Si Red Bull decide darle una última oportunidad, el Gran Premio de Japón podría convertirse en su examen definitivo.