
Alphabet, la empresa matriz de Google, ha introducido Taara, una innovadora tecnología de conexión a internet basada en láser, diseñada para llevar conectividad a lugares difíciles de alcanzar. Este avance, liderado por la división de investigación X Company, ya ha logrado su primera hazaña al conectar las ciudades de Brazzaville y Kinshasa, en la República Democrática del Congo, a través de un enlace de 5 kilómetros sobre el río Congo.
Un desafío directo a Starlink
Mientras Starlink, de SpaceX, apuesta por satélites para llevar internet a todo el mundo, Taara toma un camino diferente. Su sistema utiliza haces de luz láser del grosor de un lápiz para transmitir datos entre terminales, eliminando la necesidad de cables de fibra óptica. Con velocidades de hasta 20 gigabits por segundo y un consumo energético equivalente al de una bombilla de 40 vatios, Taara ofrece una solución rentable y rápida de implementar.
Conectividad donde antes era imposible
Taara está diseñado para entornos donde la instalación de fibra es complicada, como ciudades densamente pobladas, ríos o terrenos accidentados. Al eliminar la necesidad de permisos de servidumbre de paso y cableado físico, la tecnología puede desplegarse en cuestión de horas, a una fracción del costo de la fibra tradicional.
Una innovación global en expansión
Actualmente operando en 12 países, incluyendo India y varias regiones de África, Taara ha demostrado su eficacia no solo en entornos urbanos, sino también durante eventos masivos como el festival Coachella en Estados Unidos. Además, Alphabet planea desarrollar un chip fotónico de silicio para futuras versiones de Taara, lo que permitiría múltiples conexiones desde un solo transmisor.

La promesa de un futuro conectado
Con una estrategia enfocada en vender sus servicios a operadores de telecomunicaciones, Taara busca complementar las redes de fibra óptica existentes y superar los obstáculos geográficos que dificultan el acceso a internet. Este avance no solo representa una alternativa eficiente a las redes satelitales, sino que también podría jugar un papel clave en la expansión de la conectividad a nivel global.