Un reciente análisis ha puesto el foco en la preocupación por los microplásticos que pueden estar presentes en las bolsitas de té, debido a los materiales sintéticos utilizados en su fabricación. Estos microplásticos, al entrar en contacto con agua caliente, se liberan y pueden ser ingeridos, generando riesgos potenciales para la salud a largo plazo.
Para evitar este problema, algunas marcas han adoptado soluciones más ecológicas, fabricando sus bolsitas con materiales biodegradables como papel o fibras vegetales. Según un informe, marcas como Twinings, Lipton y Traditional Medicinals destacan por sus esfuerzos en ofrecer productos libres de microplásticos y más seguros para el consumidor y el medio ambiente.
Además, expertos en sostenibilidad sugieren que los consumidores consideren opciones como el té a granel, utilizando infusores o filtros reutilizables, lo que garantiza una experiencia más natural y libre de contaminantes.