Se enfoca en la conservación y cuidado del agua a lo largo de los siete tramos de la obra
Por Vannia Carmona
La empresa Tren Maya, S.A. de C.V., perteneciente a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), adjudicó al Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) un contrato por un monto de 24 millones 573 mil 34 pesos para realizar el monitoreo integral de los cuerpos de agua presentes en los siete tramos de la obra ferroviaria. Este servicio tiene como objetivo identificar, prevenir y mitigar posibles afectaciones a los recursos hídricos en la región por donde pasa el proyecto.
El contrato, identificado como LA-07-H0M-007H0M001-N-6-2025, estará vigente hasta el 31 de diciembre de este año. De acuerdo con el fallo de la licitación, el IMTA fue seleccionado tras presentar una oferta solvente y cumplir con los requisitos legales, técnicos y económicos necesarios para garantizar el cumplimiento del servicio.
El monitoreo incluye la evaluación de parámetros ambientales tanto en aguas superficiales como subterráneas en un máximo de 30 puntos distribuidos a lo largo de cada tramo del Tren Maya. Entre los indicadores que se analizarán en laboratorio destacan Escherichia coli, enterococos, arsénico, mercurio, plomo, zinc, alcalinidad, bicarbonatos, fluoruros, nitrógeno amoniacal, sólidos disueltos, turbiedad, calcio, magnesio, silicio y sodio, entre otros. Estos resultados serán comparados con una línea base establecida para evaluar la evolución de la calidad del agua en la zona de influencia del proyecto.
Como parte de las obligaciones del contrato, el IMTA deberá entregar cuatro reportes trimestrales y un informe final que detallen los hallazgos y conclusiones del monitoreo. En caso de detectarse fallas en las estructuras hidráulicas o afectaciones a los cuerpos de agua, se notificará inmediatamente y se propondrán acciones correctivas para evitar mayores impactos.
El monitoreo es una medida de mitigación ambiental que busca garantizar la protección de los recursos hídricos en el contexto del Tren Maya, un proyecto que ha generado críticas por sus impactos ambientales. En mayo pasado, se informó sobre la afectación de cuevas, ríos subterráneos y cenotes en el Tramo 5 Sur, que conecta Playa del Carmen con Tulum. Este tramo atraviesa una selva con ecosistemas sensibles, incluyendo especies endémicas y un sistema de ríos subterráneos único.
El Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, organismo público descentralizado, desempeñará un papel clave en la gestión y protección del recurso hídrico en el marco de este megaproyecto. Su labor no solo se enfocará en monitorear la calidad del agua, sino también en proponer estrategias para asignarla de manera equitativa entre las necesidades de la región, que incluyen el consumo humano y el desarrollo económico.
Este contrato forma parte de los esfuerzos del gobierno federal por implementar medidas preventivas que reduzcan el impacto ambiental del Tren Maya. No obstante, activistas y especialistas han demandado mayor transparencia en estas acciones, debido a la magnitud y complejidad del proyecto, así como a las repercusiones ambientales que ya se han documentado en algunos tramos.
