Tuvimos el honor de asistir a un concierto único de Melendi en la Ciudad de México, donde el cantante español desplegó su carisma, energía y romanticismo en un evento que será recordado por muchos. Como parte de su gira “20 años sin noticias”, en la que celebra su último álbum, el artista se presentó en un Auditorio Nacional repleto de seguidores mexicanos, quienes disfrutaron de un repertorio cargado de emociones y grandes momentos.
Desde su llegada al escenario, Melendi cautivó al público con su inconfundible sonrisa y su energía contagiante. El concierto, que comenzó minutos antes de las 9 de la noche, fue una verdadera fiesta musical. Con jeans y camisa negra, el artista se mostró cómodo y relajado, saludando a sus fans con calidez y cercanía. El inicio fue poderoso, con “Hijos del mal”, seguido de otros grandes éxitos como “Tocado y hundido” y “Caminando por la vida”, canciones que encendieron la multitud y contagiaron de emoción a todos los presentes.
El concierto se destacó no solo por su impresionante lista de canciones, sino también por los momentos especiales que marcaron la noche. En uno de los más emotivos, Melendi recordó su última visita a México cuando participó en La Voz Kids y compartió con el público una historia personal sobre una familia que lo acogió durante su estancia. Este momento íntimo preparó el terreno para una de las grandes sorpresas de la noche: Lucero Mijares, quien se unió a Melendi en el escenario para interpretar a dúo el tema “El único habitante de tu piel”, dejando a todos los presentes emocionados por la complicidad y la química entre ambos artistas.
Otro de los momentos inolvidables ocurrió durante la interpretación de “Mírame”, cuando Melendi, de la mano de un miembro de seguridad, saltó del escenario y se adentró entre el público, recibiendo muestras de cariño, abrazos, besos y hasta peticiones de selfies. Este gesto de cercanía y humildad hizo que la conexión con su audiencia fuera aún más profunda.
Con una duración cercana a las dos horas, el concierto incluyó clásicos como “La casa no es igual”, “Autofotos”, “Destino o casualidad” y “Cenizas en la eternidad”, haciendo un recorrido por su discografía que emocionó tanto a sus seguidores más antiguos como a los nuevos.
En resumen, el concierto de Melendi en Ciudad de México fue un derroche de talento, emoción y sorpresas, reafirmando por qué este artista sigue siendo uno de los más queridos y admirados en la música en español. Sin duda, una noche mágica que quedará en la memoria de todos quienes tuvimos el privilegio de vivirla en vivo.