Por Samantha Guerrero
Más de 50 repartidores de plataformas como DiDi, Uber y Rappi llevaron a cabo un bloqueo en Paseo Tollocan, a la altura de Roberto Fulton, para manifestar su oposición a una propuesta federal que busca imponer la seguridad social a este sector. Los trabajadores argumentan que dicha medida podría resultar en jornadas laborales forzosas de 48 horas semanales y abrir la puerta a la sindicalización, lo que amenazaría su flexibilidad laboral.
La Voz de los Repartidores
Joseph López Beltrán, vocero de los manifestantes, destacó que la propuesta fue formulada sin consultar a quienes realmente se dedican a las entregas. “Queremos que se respete nuestra libertad de conectividad y que la ley sea dual, asegurando solo a quienes lo necesiten”, expresó. La diversidad del universo de repartidores, que incluye desde profesionistas hasta estudiantes, significa que las necesidades económicas son variadas y no todas requieren un empleo formal.
Temores por el Futuro Laboral
Los repartidores temen que, con la obligatoriedad del seguro social, se vean obligados a aceptar todos los pedidos, incluyendo aquellos de zonas de alto riesgo. “Nos asaltan con pedidos falsos; si nos obligan a tomarlos, nos están exponiendo a situaciones peligrosas”, advirtió López Beltrán. La propuesta federal no solo afectaría los horarios laborales, que pasarían a ser de ocho horas diarias, sino que también podría llevar a un aumento en las tarifas, lo que disminuiría la demanda y, por ende, los empleos.
Datos que Importan
La cifra oficial de repartidores en México se estima en alrededor de 260,000, aunque los manifestantes afirman que este número podría ascender a 2 millones, impulsado por el crecimiento del sector durante la pandemia de COVID-19. La preocupación de los trabajadores es clara: la implementación de estas regulaciones podría resultar en desempleo y crisis económica para quienes dependen de este tipo de ingresos.
Un Llamado a la Acción
El bloqueo se trasladó a Palacio de Gobierno, donde los repartidores realizaron un breve posicionamiento antes de disolverse. Hicieron un llamado a la Secretaría del Trabajo para que considere las condiciones específicas de los trabajadores de plataformas de entrega y conducción, alertando que sin un enfoque adecuado, la medida podría generar más problemas que soluciones.
En resumen, la lucha de los repartidores por sus derechos laborales se intensifica, y su mensaje es claro: buscan una regulación que respete su autonomía y adapte la legislación a la realidad diversa de quienes trabajan en el sector.
