Por Fernanda Sánchez
La falta de sueño adecuado está afectando a la salud de los empleados y, en consecuencia, a la productividad de las empresas. Según el informe “Panorama del bienestar en las empresas 2025” realizado por la plataforma Wellhub, el 71% de los trabajadores duerme menos de las siete horas recomendadas, lo que repercute negativamente en su desempeño laboral.
El estudio reveló que los empleados duermen, en promedio, 6 horas y 21 minutos por noche, y además, solo el 32% considera que su descanso es saludable. Esto genera un impacto directo en su capacidad para tomar decisiones y mantener un buen rendimiento en sus tareas diarias. Como señala el informe, “un colaborador que no duerme se convierte en un zombi, incapaz de pensar con claridad y ser productivo”.
Home office y malas prácticas de sueño
Con el auge de modelos de trabajo flexibles, como el home office, muchos empleados prefieren trabajar por la noche, creyendo que son más productivos en ese horario. Sin embargo, esta práctica puede causar problemas serios de salud. A pesar de que el 86% de los trabajadores reconoce la importancia de dormir bien, pocos logran establecer hábitos de sueño adecuados.
El estrés y la ansiedad, que afectan a 53% de los empleados, son las principales causas de insomnio y mala calidad del sueño, según el estudio. Esto destaca la necesidad de que las empresas tomen medidas para mejorar el bienestar de sus colaboradores.
Impacto económico y riesgos de accidentes
El cansancio no solo disminuye la productividad, sino que también aumenta el riesgo de accidentes laborales. Un empleado somnoliento es más propenso a cometer errores, lo que puede ser crítico en profesiones de alto riesgo, como enfermería, transporte o construcción. El informe también menciona que en países como Estados Unidos, las pérdidas económicas debido a la falta de sueño ascienden a 44,000 millones de dólares anuales.
Además, la falta de descanso adecuado está relacionada con enfermedades graves como hipertensión, infartos, diabetes y deterioro cognitivo, lo que aumenta los costos médicos y los días de ausencia por enfermedad, afectando negativamente a las empresas.
Estrategias para mejorar el descanso en las empresas
El informe sugiere que las empresas incorporen prácticas de higiene del sueño en sus programas de bienestar. El uso de tecnologías como relojes inteligentes y aplicaciones móviles puede ayudar a los empleados a monitorear y mejorar su descanso. También se recomienda fomentar la meditación y el mindfulness para reducir el estrés y mejorar la calidad del sueño.
Además, educar a los empleados sobre cómo gestionar el estrés y equilibrar mejor sus responsabilidades diarias puede tener un impacto positivo tanto en su bienestar como en su productividad.