Por Samantha Guerrero
La reciente crisis diplomática entre Canadá e India ha escalado a niveles alarmantes tras las acusaciones del gobierno canadiense contra agentes indios, implicados en “homicidios, extorsión y actos violentos” en territorio canadiense. Este enfrentamiento ha llevado a la expulsión de embajadores y otros diplomáticos de ambas naciones, reflejando una ruptura significativa en sus relaciones.
Acusaciones y Reacciones
La controversia se originó cuando el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, afirmó que existían pruebas creíbles que vinculaban a agentes indios con el asesinato de Hardeep Singh Nijjar, un líder separatista sij asesinado en junio de 2023 en Surrey, Columbia Británica. Este asesinato ha sido calificado por la policía canadiense como un “ataque selectivo” dirigido específicamente a los partidarios del movimiento pro Jalistán, que aboga por una patria independiente para los sijs en India.
A pesar de las acusaciones, el gobierno indio ha descalificado las afirmaciones de Trudeau, tildándolas de “absurdas” y alegando que son el resultado de la influencia de activistas separatistas. India, además, ha pedido a Canadá que retire a numerosos miembros de su personal diplomático y suspenda los servicios de visado, señalando un deterioro en las relaciones bilaterales.
La Expulsión de Diplomáticos
El 9 de octubre de 2023, la crisis dio un nuevo giro cuando Canadá ordenó la expulsión del embajador indio y otros diplomáticos, revelando que más de una docena de agentes estaban involucrados en actividades criminales. En respuesta, India exigió la salida de seis diplomáticos canadienses, incluida la figura del embajador en funciones, Stewart Ross Wheeler, quien deberá abandonar India antes del 19 de octubre.
Wheeler, tras una reunión con las autoridades indias, indicó que Canadá había proporcionado pruebas de sus acusaciones y que era crucial que India las investigara. A su vez, el gobierno indio defendió a su embajador, Sanjay Kumar Verma, argumentando que las acusaciones eran ridículas y debían ser despreciadas.
Amenazas a la Seguridad Pública
La situación ha llevado a la policía canadiense a hacer una declaración inusual sobre las amenazas a la seguridad pública. El comisionado de policía, Mike Duheme, advirtió que había más de una docena de amenazas creíbles a la vida de miembros del movimiento pro Jalistán, lo que justificó la necesidad de una respuesta pública ante la situación.
La policía calificó el entorno como un clima de miedo, destacando la gravedad de las amenazas y la necesidad de tomar medidas contra lo que consideran una violación de la soberanía canadiense.
Impacto en las Relaciones Bilaterales
Las relaciones entre Canadá e India, que ya eran tensas, han sido severamente afectadas por este incidente. Trudeau ha sido acusado por el gobierno indio de intentar complacer a la comunidad sij de Canadá para obtener beneficios políticos, una afirmación que ha complicado aún más las negociaciones entre ambos países.
A pesar de la reanudación de la tramitación de visas por parte de India en octubre de 2023, la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Mélanie Joly, ha calificado las relaciones de “tensas” y “muy difíciles”, sugiriendo que el riesgo de más incidentes como el de Nijjar persiste.