En sus primeras semanas como presidenta de México, Claudia Sheinbaum ha enfrentado cuestionamientos sobre sus planes para el futuro del país. En medio de esto, las elecciones presidenciales en Estados Unidos están en pleno apogeo, con un empate en las encuestas preliminares entre Kamala Harris y Donald Trump.
Sheinbaum ha respondido a recientes declaraciones de Trump, quien ha señalado su intención de renegociar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) si vuelve a la presidencia. Sheinbaum fue clara al enfatizar que Estados Unidos depende cada vez más de México, destacando que las exportaciones mexicanas han alcanzado niveles históricos, lo que convierte al país en un socio crucial para la economía estadounidense.
Para Sheinbaum, cualquier modificación al T-MEC tendría consecuencias negativas para ambas naciones, dada la fuerte interdependencia de sus economías.
Una estrategia electoral de Trump
La presidenta calificó las palabras de Trump como parte de su campaña electoral, conocida por su tono agresivo. Con las elecciones estadounidenses programadas para el 5 de noviembre, Sheinbaum señaló que estas declaraciones no son más que un intento de ganar votos. Aseguró que su gobierno se mantiene sereno ante la retórica electoral, confiada en que quien resulte ganador en Estados Unidos valorará la importancia del tratado.
“Están en campaña, es normal que haya declaraciones más fuertes en uno u otro sentido”, comentó Sheinbaum.
Además, subrayó la importancia de continuar fortaleciendo no solo las relaciones comerciales con Estados Unidos y Canadá, sino también con otros países de América Latina, con la intención de impulsar el crecimiento económico regional.
Los planes de Sheinbaum con EE. UU.
En el ámbito de seguridad, Sheinbaum ha propuesto la creación de grupos binacionales para combatir delitos como el tráfico de drogas, armas y personas. Busca mantener la cooperación con Estados Unidos sin comprometer la soberanía de México. En cuanto a migración, la presidenta planea seguir la estrategia de López Obrador, apostando por inversiones en los países de origen para reducir la migración forzada.