Por Dayana Mendizabal
Jacob Elordi, el talentoso actor australiano, ha experimentado un ascenso meteórico en la industria del entretenimiento. Su notoriedad creció con el papel de Nate Jacobs en “Euphoria”, la aclamada serie de Sam Levinson, y se consolidó aún más con su participación en películas como “The Kissing Booth”. Sin embargo, su verdadera consagración llegó con su papel protagónico en “Priscilla”, dirigida por Sofía Coppola, donde interpreta a Elvis Presley y explora la relación con Priscilla Presley.
Originario de Brisbane, Australia, Elordi nació el 26 de junio de 1997, y a sus 26 años, ya ha dejado una marca indeleble en la industria cinematográfica. Aunque saltó a la fama con comedias adolescentes, su versatilidad actoral se evidencia en proyectos más maduros y desafiantes.
En el ámbito personal, Elordi ha sido vinculado sentimentalmente con figuras públicas como Joey King, con quien compartió pantalla en “The Kissing Booth”, y Kaia Gerber. Su vida amorosa ha sido objeto de atención mediática, demostrando que su atractivo trasciende la pantalla.
Además de su exitosa carrera en la actuación, Jacob Elordi ha demostrado ser un ícono de estilo. Su capacidad para fusionar elementos modernos con toques clásicos le ha valido el reconocimiento en el mundo de la moda. Desde la alfombra roja hasta sus looks casuales, Elordi se destaca como un referente de la elegancia juvenil.
Con proyectos cinematográficos como “Saltburn” y “Deep Water”, donde comparte créditos con estrellas como Ben Affleck y Ana de Armas, Elordi sigue expandiendo su repertorio. Su incursión en la televisión con “Euphoria” también dejó una impresión duradera.
A pesar de enfrentar desafíos personales y controversias mediáticas, Jacob Elordi ha demostrado resiliencia y determinación en su carrera. Su participación en películas como “He Went That Way” y su regreso a Netflix con “Falling for Christmas” sugieren que su ascenso en Hollywood está lejos de detenerse.
En resumen, Jacob Elordi no solo es un talentoso actor sino también una figura destacada en la cultura pop actual. Su presencia en la escena cinematográfica y su influencia en la moda lo posicionan como una estrella en ascenso que continuará dejando su huella en la industria del entretenimiento.
